martes, 12 de agosto de 2008

Madurez

Quizás no debería vanagloriarme de algo de lo que no soy excesivamente, la verdad. Porque, en muchos aspectos humanos, soy una persona inmadura, egoísta y caprichosa. Pero sí sé de unas cuantas cosas que te enseña a la vida. No sé si la vida le enseña a todo el mundo las mismas lecciones, supongo que no. Pero todas las lecciones que la vida te enseña merecen la pena. Sin duda. Todas y cada una de ellas.

Por eso es mejor tener que pasar por todas esas lecciones, lecciones valiosas, pues te ayudan a comprenderte a tí mismo y a comprender mejor este jodido mundo. El que no quiere aprender, es porque no quiere. Y él sabrá por qué no quiere. Eso sí es ser inmaduro.

En fin, podría tirarme horas y horas escribiendo sobre cosas que no tienen sentido ni me llevan a ninguna parte. Por eso dejo aquí este texto, dedicado a todos aquellos (en especial a una persona muy "madura") que se vanaglorian de ser inmaduros, que presumen no haber aprendido nada de la vida y que se mienten a sí mismos:






Madura


Madura, niñata,

No es ninguna tortura.

No es la vía más fácil

Ni tampoco la más dura.

Me acusas de lo que eres,

Confundiéndolo con locura,

Hace tiempo que rompí

Mis cadenas y ataduras.

Madura, niñata,

Déjate de aventuras,

Déjate de lágrimas,

Déjate de amarguras.

Te crees muy mayor

Por hacer una escultura,

Por usar papel mojado

O mancharte de pintura.

Eso es de niños pequeños.

A ver si te enteras:

¡MADURA!

Te echarás a llorar

A la primera desventura.

Descubrirás demasiado tarde

Tu vida en la basura.

A ver si te enteras:

¡MADURA!

S.C.D.










El que no aprende nada de la vida es porque no quiere.

1 comentario:

Folladora De Mentes dijo...

A veces no es que aprendamos, es que no queremos aprender... Podemos llegar a ser demasiado tontos...

A mí me gusta más la prosa (:P) pero.. muy bonito...